Un día de mercado

¿Qué fue de aquellos días de mercado?, cuando las pequeñas y grandes plazas de Mordheim bullían de vida y olores, con el ensordecedor griterío de mercaderes y buhoneros que cantaban al unísono sus productos.

Repartidos por toda la ciudad esos pequeños y grandes mercados han sido abandonados, pero como todos los lugares de esta oscura urbe esconden algún secreto olvidado.

En mi afán por darle a las partidas más juego y más belleza, se me ocurrió la idea de construir un mercado, que en cualquier momento se pudiese ampliar fácilmente. Por lo que opté por realizarlo en pequeñas piezas. 

Para llevar acabo las siguientes piezas utilicé, stirodur (para las peanas y algún elemento decorativo), madera de balsa, tela, hilo de bramante, masilla verde, césped ferroviario, cerdas de pincel y pintura acrílica.

Pd. 

Las últimas piezas son de materiales sueltos que sirven tanto para jugarlas en el mercado como en cualquier partida como simple cobertura.